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La Thermomix es uno de los robots de cocina más usados y populares en los hogares, pero empiezan a surgir dudas sobre cuánto puede durar con el paso de los años.

Computer Hoy/Montaje

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¿Cuántos años dura realmente una Thermomix? Esa es la pregunta que se hacen miles de personas antes de invertir más de 1.500 euros en un robot de cocina. No hablamos de un electrodoméstico cualquiera, sino de un aparato que muchos consideran esencial en cualquier cocina. 

La experiencia de un antiguo consultor de Vorwerk, la compañía alemana que fabrica este dispositivo, ayuda a despejar la incógnita, donde afirma que hay modelos con más de tres décadas funcionando.

Cabe señalar que la durabilidad depende del modelo, del uso y, sobre todo, de cómo cuides los accesorios, que es lo más importante. El motor puede funcionar durante años, pero una junta de tapa en mal estado puede echarlo todo a perder, así que todo depende de los cuidados que se le dé. 

El TM21, lanzado hace más de 30 años, sigue funcionando en muchas cocinas. La explicación está en su sencillez, con menos electrónica y componentes robustos que resistían un uso intensivo sin apenas fallar. 

Para muchos usuarios, este modelo tiene un estatus casi mítico, con un mantenimiento mínimo, basta con cambiar alguna junta o batidor para seguir funcionando como el primer día.

Tras él llegó el TM31, que consolidó la fama de fiabilidad de la marca. Hay testimonios de más de diez años de uso diario sin averías. Lo único que suele dar problemas son accesorios concretos, nunca el motor, que sigue siendo la parte más resistente del robot.

Con el TM5 y el TM6 la historia cambió, puesto que llegaron las pantallas digitales, la báscula integrada y más funciones conectadas. Eso supuso un salto tecnológico, pero también generó dudas: ¿resistirán igual de bien con tanta electrónica? 

Cabe señalar que la mayoría de usuarios confirman que el motor mantiene su solidez, aunque los puntos débiles son la báscula, así como algunos accesorios más delicados.

El próximo lanzamiento, el TM7, con un precio de 1.599 euros, vuelve a poner la pregunta sobre la mesa. ¿Mantendrá la durabilidad de los modelos clásicos o dependerá más de la sustitución frecuente de piezas?

El motor de una Thermomix puede durar décadas, pero los accesorios marcan la diferencia. Los más frágiles son el batidor, la junta de la tapa, la espátula o el varoma. Aun así, se trata de piezas asequibles que puedes reemplazar con facilidad. 

Por otro lado, el caso de los cuchillos es distinto, puesto que en lugar de perder filo, se afilan con el uso, lo que reduce el gasto en repuestos. El mensaje es sustituir a tiempo estas piezas, que evita problemas mayores y alarga la vida útil de todo el robot.

La experiencia demuestra que estos robots de cocina no tienen nada que ver con la media del mercado. Mientras muchos electrodomésticos duran cinco o seis años, una Thermomix puede seguir en pie 15, 20 o incluso 30 años. La clave está en cómo se use y en el respaldo del servicio técnico.

Vorwerk se ha ganado la confianza de los clientes gracias a su servicio postventa, rápido y eficaz, incluso con modelos antiguos. Esa atención, unida a la garantía inicial, explica por qué tantos usuarios se animan a pagar un precio tan alto con la expectativa de que el aparato dure más de una década sin problemas graves.

La Thermomix tiene una particularidad que explica parte de su éxito, y es que no se vende en grandes superficies ni en Amazon. Vorwerk mantiene un modelo de distribución directa, a través de demostraciones personalizadas y venta exclusiva en su web y en delegaciones autorizadas. 

Esta estrategia refuerza la imagen de producto premium y genera un vínculo cercano entre consultor y cliente. Su popularidad se ha cimentado también en el boca a boca, donde muchas compras vienen recomendadas por familiares o amigos que ya la tienen en casa. 

A esto se suma la comunidad digital de recetas, que amplía constantemente sus posibilidades y la convierte en un aparato muy popular, en constante actualización.

Otro factor es la exclusividad, en el cual el precio elevado y la forma de distribución hacen que poseer una Thermomix sea percibido como un signo de estatus. Pese a la competencia de robots más baratos, el prestigio de la marca alemana sigue pesando más en la decisión final.

La respuesta a la pregunta inicial es clara, una Thermomix puede durar décadas, pero depende de ti alargar su vida sustituyendo los accesorios a tiempo y confiando en el soporte técnico de la marca, por lo que Invertir en este robot no es comprar un electrodoméstico más.

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