Design market

El abuelo Gohan es el responsable de que la Tierra tenga al héroe más importante de toda su historia: Goku. En las aventuras de Dragon Ball, este anciano experto en artes marciales se dedicó a criar de buena manera a un pequeño niño travieso que había caído del cielo en una nave espacial.

Lee más sobre Dragon Ball: Akira Toriyama estaba en desacuerdo con la mejor escena de Piccolo: “Lo tuvimos que convencer”

Lamentablemente, murió de una de las maneras más trágicas posible: aplastado por su propio nieto, que en ese momento se había transformado en Ozaru (y no estaba consciente de sí mismo) tras mirar fijamente la luna llena.

Goku, tiempo después de la muerte de su abuelito, tuvo las esferas del dragón en sus manos. Todos nos preguntamos por qué nunca lo revivieron, para tenerlo de vuelta entre los vivos.

La explicación oficial está en las reglas de uso de las mismas esferas del dragón. No se puede revivir a una persona que lleve más de un año muerta. Para ese entonces el cuerpo ya no está en condiciones de regresar a la vida.

Sin embargo, sabemos que se pudieron haber pedido dos deseos a Shenlong: uno que restaure el cuerpo del anciano y el otro que le devuelva la vida.

En algún momento pasó por la mente de Goku, entonces es ahí cuando aparece la verdadera razón por la que nunca lo resucitaron: fue el propio abuelo Gohan quien se lo pidió.

El abuelo de Goku, consciente del ciclo natural de la vida, donde los seres vivos nacen, crecen, se reproducen y finalmente mueren, decidió respetarlo. Consideraba que la resurrección alteraba el orden natural de las cosas.

De hecho, en un momento dado, Upa, otro personaje de la serie, contempló la posibilidad de resucitarlo gracias a las Esferas del Dragón. Sin embargo, el abuelito Gohan le aseguró que era feliz en el más allá y que estaba orgulloso de ver cómo Goku continuaba creciendo y convirtiéndose en un poderoso guerrero.